UNA ESPECIE RARA
Julio Román// BUENAS NUEVAS
director y guionista de cine
El director de cine Robert Rodríguez dijo en cierta ocasión: “Hollywood es un lugar lleno de tiburones, tú necesitas un tiburón trabajando para ti.”
¿Quiénes son esos tiburones?
Las especies de tiburones hollywoodenses varían mucho. Los hay de gran tamaño, mediano y hasta pequeños. Pero lo que es seguro, es que las aguas de la meca del cine están infestadas de ellos. Así que, en lugar de mostrarle una radiografía de la comunidad de tiburones de Hollywood, voy a mencionarle solo una especie: Los agentes de talentos.
Los agentes de talento
Nunca los ves en las portadas de las revistas. Fuera de la industria, nadie reconoce sus nombres. Conseguir que uno de ellos te atienda es tan difícil como sobrevivir en una película de horror.
¿Quiénes son estos seres alienígenas que están en todas las esquinas de la industria de cine y nunca los vemos?
Ellos son los que se encargan de representar a los actores, escritores, y directores de cine, entre otros.
Un agente realiza muchas funciones. Entre ellas:
- Consiguen guiones para que sus clientes los lean y decidan si les interesa trabajar en ellos.
- Se mueven por los grandes estudios y casas productoras independientes, presentando las fotos y “demo” de sus clientes, con el fin de conseguirles trabajo.
- Negocian los salarios y las ganancias que recibirán sus clientes.
- Negocian los puntos de los contratos (generalmente son sumamente complicados).
- Consiguen oportunidades de auspicios y promociones extras. Por ejemplo, que su cliente sea el rostro de una nueva fragancia de perfume u otro producto. Esto redunda en salarios adicionales.
¿Cuánto ganan?
Generalmente, los agentes cobran el 10% de lo que recibe su cliente, bajo un contrato específico. Lo que significa, que si el cliente es una estrella de cine como Will Smith, que se gana alrededor de $20 millones por película más un porcentaje de las ganancias, estamos hablando de mucho dinero. A esto añádele que los agentes, generalmente, tienen más de un cliente. Así que, esta especie de tiburón es difícil de atrapar, pero una vez lo atrapas, se comerá lo que le pongan por delante con el fin de conseguirte los mejores contratos, ya que esto significa un cheque más grande para él. Una mordida más grande.
Como les mencioné, esta es solo una especie de tiburón – que es una de las profesiones mejores pagadas en el cine - y las aguas de Hollywood están llenas de distintas especies. Pero, Robert Rodríguez tiene razón. A la hora de enfrentarte a los tiburones, es mejor tener uno trabajando para ti. Claro está, si logras que te devuelvan la llamada.
Hasta la próxima semana.
///Julito
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