Erika Mishel// BUENAS NUEVAS
@ErikaMishel12
La palabra celos proviene del latín zēlus, que significa ardor o hervir. No debería sorprendernos este origen, ya que los celos hacen precisamente esto: arder nuestras emociones y revelar lo que hay en nosotros.
Este escrito surge como una preocupación que tuve luego de leer una frase en una página para adolescentes que decía: “Si te cela es porque realmente te ama”.
¿Cuántas veces hemos caído en esta misma mentira? ¿Los celos serán la evidencia clara del amor? ¿Una relación en la que no hay una experiencia de celos, es una buena relación? Veamos lo que Norman Wright, autor de más de 60 libros y consejero familiar, dice sobre las relaciones:
La palabra celos proviene del latín zēlus, que significa ardor o hervir. No debería sorprendernos este origen, ya que los celos hacen precisamente esto: arder nuestras emociones y revelar lo que hay en nosotros.
Este escrito surge como una preocupación que tuve luego de leer una frase en una página para adolescentes que decía: “Si te cela es porque realmente te ama”.
¿Cuántas veces hemos caído en esta misma mentira? ¿Los celos serán la evidencia clara del amor? ¿Una relación en la que no hay una experiencia de celos, es una buena relación? Veamos lo que Norman Wright, autor de más de 60 libros y consejero familiar, dice sobre las relaciones:
- Una relación es un entrelazamiento de dos vidas; dos tipos de humor, de mentalidades y temperamentos.
- Lo más que importa en la vida no son las escaleras que subimos o las posesiones que acumulamos. Lo más que importa son las relaciones.
- Las relaciones de pareja deben crecer en varias dimensiones. Algunas de ellas son: la confianza, el respeto, la comprensión y el amor. Si alguna de ellas no se desarrolla, la relación no estará completa.
Ahora bien, decidimos tener una relación de noviazgo con una persona. Esta persona nos gusta, nos atrae, estamos enamorados, pero al poco tiempo de comenzar la relación, nos damos cuenta de que hay algo que nos incomoda. Sentimos como una extraña inquietud que comienza a nacer poco a poco como un pensamiento constante que dice: “tal vez se fije en ella”, “no sé qué se trae este hombre con mi novia”, “quizás merezca a alguien mejor que yo…”. Es entonces cuando permitimos que estos pensamientos nos arropen al grado de actuar en favor de ellos.
Todos en algún momento hemos conocido a parejas o hemos estado en una relación afectada por los celos; tal vez fuimos nosotros los celosos. ¿Cómo se manifiestan los celos?
Los celos pueden manifestarse de diversas formas. Puede ser desde una pregunta insistente hasta una persecución. Una persona celosa puede llegar a actuar a extremos. ¿Por qué? Una persona celosa actúa conforme a su propia idea de los hechos.
¿Eres celoso?
¿Qué nos lleva a sentir celos?
- Experiencias traumáticas- si viviste infidelidad en tu familia o fuiste víctima de infidelidad por parte de tu pareja.
- Ideas compartidas- si nos dejamos llevar por lo que nuestras amistades piensan sobre nuestra pareja o sobre experiencias que ellos vivieron.
- Paradigmas- si adoptamos lo que la sociedad piensa sobre las relaciones. Por ejemplo: todos los hombre son iguales, todos son infieles.
- Autoestima- si tenemos una idea pobre de quiénes somos. Pensamos que otra persona siempre es mejor que nosotros, por lo tanto, nuestra pareja va a preferir estar con él o ella.
- Egoísmo- si tenemos la necesidad de que nuestra pareja centre toda su vida en nosotros; no queremos que hable con nadie más, pues con nosotros debe ser suficiente.
- Miedos irracionales- si constantemente te encuentras pensando en que te va a suceder todo aquello a lo que le temes, por ejemplo, el abandono o rechazo de tu pareja.
Si te has podido identificar en algunas de estas características, puedes estar experimentando celos hacia tu pareja.
¿Qué nos dice la biblia sobre los celos?
“…sus celos, inflexibles como una tumba. Se quema como fuego ardiente, como una llama poderosa”. (Traducción al español, NIV -Cantares 8:6)
¿Todavía sigues pensando que si te cela es porque te ama?
Los celos son inflexibles como una tumba, como un fuego ardiente y una llama poderosa. ¿Te imaginas estar encerrado dentro de una casa que se está quemando, pero que no tiene puertas para poder salir? Así mismo son los celos. Nos quemamos emocionalmente. Los celos nos hacen ser inflexibles con nuestra pareja, nos mueven a actuar con egoísmo y con maldad, aun cuando no lo queramos así. Los celos comienzan como un fuego pequeño y simple, el cual nos cubrirá por completo si no lo detenemos a tiempo. Esto no se me parece para nada a la cualidad clara del amor. No podemos confundir los celos con interés y mucho menos con amor.
1 de Corintios 13: 4-7 (NTV) dice:
El amor es paciente y bondadoso. El amor no es celoso ni fanfarrón ni orgulloso ni ofensivo. No exige que las cosas se hagan a su manera. No se irrita ni lleva un registro de las ofensas recibidas. No se alegra de la injusticia sino que se alegra cuando la verdad triunfa. El amor nunca se da por vencido, jamás pierde la fe, siempre tiene esperanzas y se mantiene firme en toda circunstancia
Una relación saludable es una en la que los cuatro pilares que menciona Norman Wright (confianza, respeto, comprensión y amor) son la base de ella. Los celos no son sinónimo de que tu pareja te ama. No obstante, una persona que te ama también puede sentir celos. Sin embargo, para que una relación pueda crecer en confianza, comprensión, amor y respeto, los celos no pueden tener un espacio en ella. Los celos serán como un fuego que consuma todo lo bueno y sano que haya en su amor. Por lo tanto, aprende a huir de ellos. Ten confianza en ti mismo y en tu pareja. Al final de todo, tu seguridad y tu confianza serán una piedra angular en la formación de una relación sana. Aprendan a compartir sanamente entre amigos y con personas del sexo opuesto. Si te ama, te respetará.
@ErikaMishel12
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