En momentos en los que el presidente Barack Obama presiona a los legisladores respublicanos para que acepten un aumento de los impuestos, para evitar un déficit presupuestario. El profesor R.C. Sproul Jr., autor de “Una economía para todos”, asegura que los Estados Unidos debe crear una reforma económica con base en los principios bíblicos.
El debate sobre este tema, en la nación norteamericana, sobre sí la carga impositiva debe ser de un 45 ó 48 por ciento, Sproul considera que la reforma sólo sucederá cuando se vuelva a las Escrituras para ver lo que Dios tiene que decir acerca de la economía. Por eso produjo una serie de videos llamados "Economía para todos".
Sproul admite que la Biblia no es un libro de texto de economía, pero si dice mucho sobre el tema. "El principio económico primero y más básico que realmente tenemos que entender es simplemente esto: Dios es dueño de todo", comenta.
En la serie, Sproul examina dos visiones del mundo que compiten: el cristianismo y la cosmovisión atea expresados en la teoría de Darwin, de la evolución.
Ambos puntos de vista tienen una profunda influencia en la economía. "En la perspectiva darwiniana las cosas simplemente suceden. Sólo aparecen. Y si las cosas sólo aparecen, entonces eso significa que la riqueza sólo aparece", explica.
Naciones cristianas más prósperas
Una cultura que abraza una visión cristiana del mundo también abarca la ley de Dios. Sproul mantiene que cada uno de los Diez Mandamientos contienen principios económicos fundamentales, y no solamente por el “no robarás”.
Sproul proporciona evidencia histórica de que las naciones más influenciadas por el cristianismo bíblico son naciones que, por lo general, han prosperado. Son naciones marcadas por los gobiernos descentralizados y los mercados libres.
Pero las naciones que rechazan a Dios están marcadas por el poder centralizado, la tiranía, y no el libre mercado. Desafortunadamente, asegura que ha observado algunas de esas tendencias preocupantes en Estados Unidos, en la actualidad.
"Estados Unidos no es un mercado libre. Es una economía intervencionista que ha estado acercándose al socialismo durante más de un siglo", dijo. "No soy optimista sobre el futuro económico de nuestra nación".
"Vivimos en un país donde el Estado me prohíbe contratar a un hombre a menos que él me comprometo a pagar “x” cantidad de dólares", explicó Sproul. "Ahora vivimos en un país donde no puedo contratar a 50 hombres a menos que me comprometo a comprar todos los seguros de salud, incluido el acceso al aborto. Esta no es la libertad económica. Esto no es el libre mercado", dijo.
Es por eso que Sproul cree que no es suficiente pensar de una forma conservadora. Debemos pensar bíblicamente y educar a nuestros hijos bíblicamente. "Es mi convicción de que la educación es siempre y en todas partes religiosa", dijo.
Sproul advierte a los cristianos deben evitar la desesperación. Una forma de hacerlo es volviendo al principio, con el Mandato de la Creación y empezamos a ver que nuestro trabajo es parte de la adoración.
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