¿Cómo sé si es Dios quien me está llamando a servir en misiones? En primer lugar necesitas reconocer si tienes una relación personal con Dios. Ser cristiano y servir a Dios va más allá de asistir a la iglesia o haber levantado la mano para recibir a Jesús y hacer la oración de conversión. Ser cristiano es una vida de relación íntima y personal con tu Señor y Salvador Jesucristo. Es importante señalar que Jesús no es solo tu salvador, sino también tu Señor. Eso significa que estás sometido a él, que él es tu dueño. (Mateo 7:21) Que él manda tú le obedeces. Que hacer su voluntad en lo que buscas y te agrada, como dijo el salmista David, (Salmo 40:8) aunque no siempre será fácil obedecerle. Que has aceptado el reto que nos lanzó Jesús: “Buscad primeramente el reino de Dios y su justicia y todas las demás cosas nos serán añadidas” (Mateo 6:33)
Si has decidido voluntariamente, de corazón, seguir a Jesús, entonces ocurrieron tres cosas: (1) Te negaste a ti mismo, lo que significa SER lo que él quiere que seas. (2) Tomaste tu cruz cada día, lo que significa HACER lo que él quiere que hagas y (3) Le seguiste, lo que significa IR donde él te envíe. (Lucas 9:23). Ha sido tu decisión y Dios te ha recibido. Lo que te cualifica no son tus dones, talentos o capacidades; sino tu disposición a seguirle y obedecerle. Si tienes una relación personal con tu Señor, conoces su voz y sabes cuando él habla a tu corazón. En nuestra cultura evangélica pentecostal nos acostumbramos a que un llamado surge a raíz de una palabra profética o que Dios use a alguien para hablarnos y decirnos lo que debemos hacer. Si bien es cierto que Dios puede hablarnos en profecía, esto lo que hace es confirmar lo que ya Dios ha puesto en nuestro corazón. Dios usará muchos medios para hablarte, pero lo que le da firmeza a tu llamado es la convicción del Espíritu a tu corazón. Hay tres fuerzas que influencian nuestro mundo espiritual: Satanás, nuestra carne y Dios. Satanás no te va a inspirar a dar tu vida para que otros conozcan la verdad de Dios. La carne no te va a llamar a esforzarte y sacrificarte para que otros conozcan a Jesús. Dios sí ya te ha reclutado y te ha dicho que estará contigo en tu camino de obediencia a ir y hacer discípulos a todas las naciones….(Mateo 28:19)
TODOS tenemos un llamado a ir a las naciones. Solo necesitas definir si Dios quiere usarte saliendo de tu nación o desde tu nación, pero sí estás llamado a ir. Desde que te convertiste Dios te dio el ministerio de la reconciliación y el mensaje para reconciliar a otros con él. También te dio la posición de su embajador. (2Corintios 5:17-20) Todo creyente tiene un llamado a servir en misiones, pero la mayoría no lo ha comprendido. A algunos Dios llamará a servir en el campo transcultural. De eso hablaremos la próxima semana.
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