@ErikaMishel12
Todos los días tomamos decisiones. La decisión puede definirse también como una determinación, es decir, moverte a hacer algo o no hacer alguna cosa.
¿Qué nos dice la biblia sobre las decisiones?
Andan diciendo algunos: «Todo me está permitido». Sí, pero no todo es conveniente. Y, aunque todo me esté permitido, no debo dejar que nada me esclavice. (1 Corintios 6:12, BLP)
Las relaciones que llevemos a lo largo de nuestra vida pueden hacernos crecer o destruirnos. Pasamos gran parte de nuestra vida en relaciones que no nos benefician, por el contrario, nos esclavizan.
¿Qué hace que yo decida con quién relacionarme?
- Nuestra necesidad de afecto: Naturalmente los seres humanos sentimos la necesidad de afecto. Es decir, la necesidad de ser amados, cuidados, comprendidos, valorados. A medida que aumenta esa necesidad, estamos más propensos a entrar en relaciones negativas. ¿Por qué? Cuando tenemos hambre, raramente pensamos cuán saludable es lo que vamos a comer. De igual manera, mientras más necesidad de ser amado tengamos, menos profundamente vamos a evaluar cuán saludable puede ser esa relación.
- Nuestras experiencias previas: Si anteriormente hemos tenido experiencias tristes o desagradables en el amor, ya sean personales o experiencias de nuestros amigos o familiares, puede que estemos más decididos a no enamorarnos. Por el contrario, estaremos huyendo una y otra vez de relación en relación buscando recibir un afecto, y cuando lo recibimos, nos alejamos. Aunque algunos piensen que este es un modo de protegerse, puede ser también una forma de herirnos más y herir más a la otra persona.
- ¿Qué estás buscando?: Te tengo una noticia, encontrar pareja no es un proceso mágico, no es cuestión de suerte; es una cuestión de compromiso y valor personal. Muchas personas siguen solteros porque simplemente no tienen ni idea de lo que esperan encontrar en una pareja. Lamentablemente, las grandes películas que nos encantan (y me incluyo orgullosamente) no nos muestran una realidad del amor. Cuando sepas lo que esperas de una persona, serás capaz de no aceptar aquello que no estás dispuesto/a a obtener.
Y si ya conociste a la persona que te tiene enamorado y crees que es la persona correcta, ¿qué vas a hacer?
Como jóvenes cristianos, cometemos dos errores clásicos: espiritualizar demasiado las relaciones y dejar a Dios a un lado de nuestras relaciones.
Por alguna razón, tenemos la tendencia a querer que Dios sea quien tome nuestras decisiones. La Biblia no hace muchas referencias en cuanto a este tema. Sí nos habla sobre tomar decisiones correctas, huir de la tentación y no aceptar las presiones sexuales. Sin embargo, no hace referencia a "vive feliz y tranquilo que yo haré que aparezca el amor de tu vida". Por lo tanto, esa es una decisión que Dios espera que tú tomes. Por supuesto que Dios puede hacer que conozcas a la persona ideal, pero el día a día de esta relación le corresponde a ustedes.
Por otro lado, ten siempre a Dios presente en tus planes y metas.
¡Esta es la mejor decisión que puedes tomar!
Hay un verso que dice:
Ama al Señor con ternura, y él cumplirá tus deseos más profundos. (Salmos 37:4, DHHD)
Es bien importante que para todo y en todo Dios sea el primer lugar.
Si le entregas a Dios tu voluntad, Él te va a dirigir a la persona correcta.
Cada gran decisión viene acompañada de muchas pequeñas decisiones y actos cotidianos. Ten cuidado de elegir a una persona que quiera dormir contigo, pero no caminar junto a ti. Una vez comiences una relación, no te alejes de tu relación con Dios como si fuera solo una alternativa para los solteros. Recuerda: Ama al Señor con ternura, y él cumplirá tus deseos más profundos...todos los días de tu vida.
Espera la próxima lección: Propósito.
@ErikaMishel12
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