“A Thief in the Night”
Director, guionista de cine
Con el auge que está teniendo el cine cristiano, principalmente en Estados Unidos, me puse a pensar en la primera película cristiana que vi.
A pesar de que no recuerdo todos los detalles de la trama, sí recuerdo, como si fuera hoy, cómo me sentí al verla.
Con el auge que está teniendo el cine cristiano, principalmente en Estados Unidos, me puse a pensar en la primera película cristiana que vi.
A pesar de que no recuerdo todos los detalles de la trama, sí recuerdo, como si fuera hoy, cómo me sentí al verla.
Gracias a mi tía
Tenía siete años de edad, cuando una de mis tías- que es cristiana- me invitó a su iglesia a ver una película. Espero que todos hayan tenido una tía como ella. Es el tipo de cristiana que iba por todo el barrio recogiendo a los niños para darle clases bíblicas en el balcón de su casa. Ahí fue donde escuché por primera vez la historia de David y Goliat. Mi tía lleva como 40 años en el Evangelio, y todavía está encendida con el fuego de Dios. Actualmente, está haciendo misiones a República Dominicana.
Recuerdo que llegamos a la iglesia. Habían preparado el pequeño estacionamiento con varias sillas, y una pequeña pantalla al frente.
Una experiencia fuerte para un niño
Comenzó la película. El título: “A Thief in the Night”. Fue realizada en el 1972, y su historia presentaba el rapto de la iglesia, y la “Gran Tribulación”. Ya se puede imaginar el impacto que causó en mí, ver a una mujer huyendo, para no ser obligada a ponerse la “marca de la bestia”.
Fue la primera vez que escuché la palabra “bestia”, sin que se usara como un insulto.
Era una película de suspenso, ahora lo entiendo. Pero en ese momento, estaba aterrado. ¿Será esa película la responsable de que las dos películas que he dirigido sean de suspenso? Hum. Ok. Volviendo al tema.
Algo les puedo garantizar, viví toda mi adolescencia (no era cristiano) con el conocimiento de que si Jesús venía a buscar su iglesia, no me hubiera ido en el rapto. Todo, gracias a esa película.
El refugio secreto
Hasta tenía un plan. Los primeros tres años y medio construiría un refugio secreto en el monte, detrás de mi casa; almacenaría comida, y durante los otros tres años y medio me escondería en él hasta que terminara la “Gran Tribulación”. El debate estaba en a quiénes incluiría en mi plan. Quiénes serían los afortunados de salvarse conmigo.
Nunca se lo dije a nadie. Era un jovencito planificando mi supervivencia, allá los demás que se resuelvan con el anticristo. Afortunadamente, a los 18 años entregué mi vida al Señor, y pude abandonar ese plan magnífico (y egoísta).
El poder de una historia del reino
Mi punto es el siguiente: esa película estaba tan llena de la Verdad de Dios que, literalmente, su mensaje me confrontó durante toda mi adolescencia.
Esa noche, en ningún momento pasó por mi mente que algún día estaría trabajando en cine. Pero le doy gracias a Dios porque experimenté de primera mano, el resultado del mismo principio en el que ahora estoy enfocado. Realizar películas impregnadas de la Palabra de Dios.
Ahora que lo pienso, quizás algún día debo realizar nuestra versión de la “Gran Tribulación”, con el fin de que un joven descubra que no tiene que pasar su adolescencia ideando un plan de supervivencia, y que solo tiene que confiarle su vida al Padre Celestial.
En el área de comentarios, déjame saber cuál fue la primera película cristiana que viste.
Hasta la próxima semana.
///Julito
BUENAS NUEVAS es una publicación enfocada en presentar las buenas noticias en Puerto Rico, y el extranjero. Además de equipar al pueblo con su verdadera identidad eterna. Si desea compartirnos lo que harán en su comunidad o iglesia, tiene alguna petición etc. escríbanos a redaccion@buenasnuevaspr.com. Le invitamos a que nos comparta sus comentarios.
Tenía siete años de edad, cuando una de mis tías- que es cristiana- me invitó a su iglesia a ver una película. Espero que todos hayan tenido una tía como ella. Es el tipo de cristiana que iba por todo el barrio recogiendo a los niños para darle clases bíblicas en el balcón de su casa. Ahí fue donde escuché por primera vez la historia de David y Goliat. Mi tía lleva como 40 años en el Evangelio, y todavía está encendida con el fuego de Dios. Actualmente, está haciendo misiones a República Dominicana.
Recuerdo que llegamos a la iglesia. Habían preparado el pequeño estacionamiento con varias sillas, y una pequeña pantalla al frente.
Una experiencia fuerte para un niño
Comenzó la película. El título: “A Thief in the Night”. Fue realizada en el 1972, y su historia presentaba el rapto de la iglesia, y la “Gran Tribulación”. Ya se puede imaginar el impacto que causó en mí, ver a una mujer huyendo, para no ser obligada a ponerse la “marca de la bestia”.
Fue la primera vez que escuché la palabra “bestia”, sin que se usara como un insulto.
Era una película de suspenso, ahora lo entiendo. Pero en ese momento, estaba aterrado. ¿Será esa película la responsable de que las dos películas que he dirigido sean de suspenso? Hum. Ok. Volviendo al tema.
Algo les puedo garantizar, viví toda mi adolescencia (no era cristiano) con el conocimiento de que si Jesús venía a buscar su iglesia, no me hubiera ido en el rapto. Todo, gracias a esa película.
El refugio secreto
Hasta tenía un plan. Los primeros tres años y medio construiría un refugio secreto en el monte, detrás de mi casa; almacenaría comida, y durante los otros tres años y medio me escondería en él hasta que terminara la “Gran Tribulación”. El debate estaba en a quiénes incluiría en mi plan. Quiénes serían los afortunados de salvarse conmigo.
Nunca se lo dije a nadie. Era un jovencito planificando mi supervivencia, allá los demás que se resuelvan con el anticristo. Afortunadamente, a los 18 años entregué mi vida al Señor, y pude abandonar ese plan magnífico (y egoísta).
El poder de una historia del reino
Mi punto es el siguiente: esa película estaba tan llena de la Verdad de Dios que, literalmente, su mensaje me confrontó durante toda mi adolescencia.
Esa noche, en ningún momento pasó por mi mente que algún día estaría trabajando en cine. Pero le doy gracias a Dios porque experimenté de primera mano, el resultado del mismo principio en el que ahora estoy enfocado. Realizar películas impregnadas de la Palabra de Dios.
Ahora que lo pienso, quizás algún día debo realizar nuestra versión de la “Gran Tribulación”, con el fin de que un joven descubra que no tiene que pasar su adolescencia ideando un plan de supervivencia, y que solo tiene que confiarle su vida al Padre Celestial.
En el área de comentarios, déjame saber cuál fue la primera película cristiana que viste.
Hasta la próxima semana.
///Julito
BUENAS NUEVAS es una publicación enfocada en presentar las buenas noticias en Puerto Rico, y el extranjero. Además de equipar al pueblo con su verdadera identidad eterna. Si desea compartirnos lo que harán en su comunidad o iglesia, tiene alguna petición etc. escríbanos a redaccion@buenasnuevaspr.com. Le invitamos a que nos comparta sus comentarios.