Grupo Puerto de Milagros
Todos nosotros en algún momento de nuestra vida hemos experimentado el fracaso. El problema es que desde muy pequeños, nuestros padres nos preparan para el éxito. Éxito en los estudios, concursos, deportes, en los trabajos, pero casi nunca nos enseñan sobre el fracaso. Es por eso que cuando uno fracasa en alguna faceta, nos podemos sentir tristes ó aturdidos por no haber podido realizar nuestro sueño o tarea. Si pudiéramos echar marcha atrás, muchas de las cosas que hicimos las haríamos de una forma totalmente diferente. Cuando estamos en la decisión de llevar algo a cabo, algunas veces cometemos el error de tomar decisiones dejándonos llevar por nuestros deseos y no por lo más correcto y eso nos puede llevar al fracaso.
Por lo general cuando te relacionas con muchas personas, puedes experimentar los fracasos que te han ocurrido, ya sea por metas que ellos han logrado y tu no lo has podido realizar ó porque le has fallado en alguna forma. Todos hemos hecho cosas a los demás de las cuales nos podemos sentir arrepentidos. Lo interesante es que muchas veces vemos el error o la falla que cometemos mucho después, cuando creemos que es difícil de arreglar. En Josué 1:9 nos dice: Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas. En medio del fracaso y de la duda Dios permanece siempre.
Todos nosotros en algún momento de nuestra vida hemos experimentado el fracaso. El problema es que desde muy pequeños, nuestros padres nos preparan para el éxito. Éxito en los estudios, concursos, deportes, en los trabajos, pero casi nunca nos enseñan sobre el fracaso. Es por eso que cuando uno fracasa en alguna faceta, nos podemos sentir tristes ó aturdidos por no haber podido realizar nuestro sueño o tarea. Si pudiéramos echar marcha atrás, muchas de las cosas que hicimos las haríamos de una forma totalmente diferente. Cuando estamos en la decisión de llevar algo a cabo, algunas veces cometemos el error de tomar decisiones dejándonos llevar por nuestros deseos y no por lo más correcto y eso nos puede llevar al fracaso.
Por lo general cuando te relacionas con muchas personas, puedes experimentar los fracasos que te han ocurrido, ya sea por metas que ellos han logrado y tu no lo has podido realizar ó porque le has fallado en alguna forma. Todos hemos hecho cosas a los demás de las cuales nos podemos sentir arrepentidos. Lo interesante es que muchas veces vemos el error o la falla que cometemos mucho después, cuando creemos que es difícil de arreglar. En Josué 1:9 nos dice: Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas. En medio del fracaso y de la duda Dios permanece siempre.
Recuerda que el fracaso no es el fin de tu vida, todo lo contrario. El error que cometiste ya paso y no va a determinar tu futuro. Fracaso no significa que jamás lograremos nuestras metas, significa que tardaremos un poco más en alcanzarlas. Todos caemos al suelo, lo importante es sacudirnos el polvo y seguir hacia delante de la mano de nuestro Señor Jesucristo. No te voy a negar que puede ser difícil aceptar nuestra realidad, pero recuerda que podemos llamar a la línea directa JESUCRISTO y el va a estar disponible 24/7 para ayudarnos. Nuestro destino es vencer en el nombre de Jesús.
Hasta la próxima.
Joel Hernández
BUENAS NUEVAS es una publicación enfocada en presentar las buenas noticias en Puerto Rico, y el extranjero. Además de equipar al pueblo con su verdadera identidad eterna. Si desea compartirnos lo que harán en su comunidad o iglesia, tiene alguna petición etc. escríbanos a redaccion@buenasnuevaspr.com. Le invitamos a que nos comparta sus comentarios.
