@ErikaMichael12
Si eres fan de las historias de amor (como yo), sin duda, debes haber visto la película The Vow, protagonizada por la bella Rachel McAdams y el guapísimo Channing Tatum. Esta es una de las historias más románticas de los últimos tiempos, y sorprendentemente no fue escrita por el novelista Nicholas Sparks
(quien siempre tiene las mismas portadas en sus libros). En fin, yo fui de las primeras personas en ver la película. Me cautivó la historia simple de un hombre que ama a su esposa de manera incomparable.
Para ser honesta, la película no me encantó. Así que como buena escritora y amante de la lectura, me compré el libro escrito por los protagonistas de la verdadera historia, Kim y Krickitt Carpenter.
Para que tengas una idea, te haya gustado o no la película, debes leer el libro para que puedas sentir un poco más de cerca la historia valiente de este matrimonio.
Ambos vivían en diferentes estados, pero coincidieron en una tienda de artículos deportivos donde ella trabajaba. Sus conversaciones telefónicas no cesaron y las cartas (escritas a mano) no se hicieron esperar. Se enamoraron. Se amaron grandemente, y decidieron casarse. Al poco tiempo de casarse, cuando se dirigían a su primera cena de Acción de Gracias como matrimonio, tuvieron un aparatoso accidente automovilístico. Ella, quien manejaba, quedó pillada entre el volante, el cristal y el techo. Ambos quedaron graves con lastimaduras difíciles de sanar, pero ella…perdió la memoria.
¿Te imaginas esta escena? Su esposo apenas con fuerzas (y en contra de la orden médica) se dirige a la habitación de aquella mujer a quien prometió amar con su vida en cualquier circunstancia, y esta al verlo, piensa que es un doctor más. Él la mira a los ojos con la esperanza de ver ese brillo incomparable del amor en ella, y ella lo mira con una mirada vacía preguntando por su familia. Según el caso de Krickitt, ella perdió toda memoria corta (es decir, los hechos más recientes de su vida) y comenzó levemente a recuperar la memoria larga (los eventos que trascienden a muchos años atrás).
Ella no recordaba que amaba a su esposo.
Ella no sentía absolutamente nada por el hombre a quien prometió amar.
Ella no sentía absolutamente nada por el hombre a quien prometió amar.
En la página 92 del libro, dice que la parte más alentadora de la recuperación de Krickitt fue que, de alguna manera, su fe en Dios había quedado intacta. Por más confusa que se encontrara su mente, ella oraba a Dios, y recordaba versos bíblicos que escribía en su diario. De hecho, su hermano afirmó: “El cristianismo de Krickitt es su esencia; es parte de su alma. Ninguna herida puede dañar el alma. Su fe siempre estará allí.”
Para culminar la historia, ella nunca pudo recuperar la memoria. Nunca pudo recordar quién era su esposo ni lo que había sentido, aun viendo el video de su boda.
Entonces, aquí tienen la parte más impresionante de la historia:
Él decidió volver a comenzar. Enamorarla una vez más.
Ella decidió aceptar. Comenzaron de nuevo.
Se casaron una segunda vez, tuvieron una segunda luna de miel en el mismo sitio en Hawaii.
Tuvieron una segunda oportunidad.
Ahora, cuando seques tus lágrimas, permíteme compartir contigo algunos detalles sobre el amor que aprendí de esta historia:
- El amor es simple. No digo que será fácil, digo que es simple. El amor se reconoce cuando lo experimentas, porque puedes aceptar el reto de una entrega total. Si te “enchismas” cuando tu novio o novia no puede hacerte caso por unos minutos porque está en otro asunto, creo que aún no estás preparado para casarte. El compromiso de esta pareja fue constante. Él recibió rechazos de la mujer que más amaba en la Tierra. Ambos pudieron morir. Pero él simplemente supo que ella era la mujer con la que quería pasar cada día de su vida, en los días buenos y los no tan buenos.
- El amor es posible. ¿Cuántos de nosotros nos hemos preguntado alguna vez si estará en algún lugar esa persona que nos cautivará? Y no solo eso, esa persona que también será cautivada por nosotros. Esto puede ser frustrante para muchos, pero te aseguro que el amor es posible. He aprendido que se logra más amando que encerrándonos en una tonta burbuja de frustraciones. Debes entender que cada historia es distinta. El amor no tiene que ser una historia “comerciable” para ser real. De hecho, en ocasiones, lo más real que tendrá el amor será esa mano amiga que te sostenga durante una estadía en el hospital o esa palabra de aliento cuando pienses que lo echaste todo a perder.
- El amor brinda una nueva oportunidad: El amor es interesante. Cada vez que me despierto en la mañana, sé que es una nueva oportunidad que tengo para hacer reír a alguien, al fin terminar mi novela, saludar a mis amigos y amar. Quiero que comprendas el valor que tiene cada día en tu vida. El amor es capaz de brindarnos una nueva oportunidad. ¿Por qué? Porque cuando amamos, aceptamos. Yo no tuve un ejemplo de un matrimonio como muchos de ustedes quizás sí lo tuvieron. Pero, gracias a Dios, tuve la enseñanza de un amor puro, genuino y honesto que desarrollamos en mi familia. Mi mamá nos enseñó a no acostarnos a dormir enojados uno con el otro y a servir aunque estuviésemos en desacuerdo. Creo que el amor nos debería mover a ser más justos y honestos con la gente que amamos. Debemos aprender a cuidarnos el uno al otro. El amor nos ayuda a mirar al otro con ternura y aceptar que se puede volver a comenzar.
La fe de Krickitt fue su esencia. En medio de una experiencia tan difícil de manejar, su fe se mantuvo presente, y ciertamente les ayudó a enfrentarlo todo con mayor fortaleza. Chicos, el amor nos haría escribir cientos de artículos como este, y aún así no acabaríamos de descifrarlo. Pero si de algo puedo estar segura es que el amor es simple, es posible y nos brinda una nueva oportunidad. No lo desaprovechemos.
@ErikaMichael12
Construyendo relaciones saludables.
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